El Tribunal Supremo ha anulado la iniciativa aprobada en la pasada legislatura que buscaba frenar la expansión de las salas de apuestas en Burgos. Esta medida, impulsada por Podemos Burgos y respaldada unánimemente, pretendía controlar las nuevas aperturas en zonas residenciales, pero ahora se encuentra sin efecto.
La formación advierte que el crecimiento descontrolado de las salas de apuestas está causando un daño significativo entre los jóvenes y las clases más desfavorecidas. En varias áreas de la ciudad, estos locales se encuentran peligrosamente cerca de centros educativos, lo que agrava la situación. La ludopatía es una adicción que se expande rápidamente, afectando de manera preocupante a menores de edad.
Un PP con intereses directos afirman desde la formación
El partido ha señalado que el Partido Popular (PP) del Ayuntamiento de Burgos, a pesar de apoyar la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en un primer momento, recurrió la decisión desde la Junta, mostrando su alineación con los intereses de la industria del juego. Para Podemos que el procurador burgalés Ángel Ibáñez esté presente en el Congreso del Juego de Castilla y León ha evidenciado su sintonía con aquellos que se benefician económicamente de esta problemática.
Podemos recuerda que ha insistido en repetidas ocasiones en la importancia de abordar la ludopatía con seriedad. Diversas propuestas se han llevado al Pleno del Ayuntamiento para proteger a la ciudadanía de este negocio dañino, tanto socialmente como en términos de salud mental. No obstante, señalan los morados, el fallo del Tribunal Supremo deja a los burgaleses vulnerables frente a esta amenaza.
Para Podemos Burgos, la situación actual refleja una desconexión entre las necesidades de la población y las decisiones judiciales. La proliferación de las casas de apuestas no solo afecta a nivel social, sino también en la esfera de la salud pública. La formación alerta que el Tribunal Supremo «está jugando con la salud de las burgalesas», reiterando la urgencia de medidas efectivas.
Podemos pide acciones concretas
En este contexto, Podemos considera esencial que las autoridades municipales y autonómicas reconozcan el impacto negativo de las salas de apuestas y tomen acciones concretas para mitigar sus efectos. La comunidad burgalesa merece protección ante una industria que, sin regulación adecuada, puede causar estragos en la salud y bienestar de sus ciudadanos, según la formación.
Desde la formación se comprometen a seguir trabajando en propuestas que aborden la problemática del juego patológico. Y afirman que es fundamental que se adopten políticas que limiten la apertura de nuevos locales en áreas vulnerables y protejan a los más jóvenes de caer en esta adicción.
Podemos Burgos advierte que el Tribunal Supremo «está jugando con la salud de las burgalesas», y la comunidad debe responder con firmeza. La protección de los jóvenes y las familias más vulnerables debe ser una prioridad en las políticas municipales y autonómicas. Solo así se podrá construir un futuro más seguro y saludable para todos.