En el marco del Día de la Declaración de los Derechos Humanos, Valladolid Toma la Palabra (VTLP) ha expresado su profunda preocupación por lo que consideran un alarmante abandono de la defensa de estos principios fundamentales por parte del actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Valladolid.
Rocío Anguita, portavoz de VTLP, ha denunciado la falta de consenso político en eventos y declaraciones institucionales relacionadas con derechos humanos. «Cada vez vemos cómo en los actos institucionales de apoyo a determinados colectivos no hay declaraciones unánimes de todos los grupos políticos», afirmó. Según Anguita, esta división se hace patente en fechas clave como el Día contra la Violencia de Género y las iniciativas de respaldo al colectivo LGTBI.
En su intervención, Anguita destacó un caso concreto: «Es especialmente alarmante que Valladolid haya perdido la oportunidad de acoger un centro para personas migrantes y refugiadas propuesto por el Ministerio. Esto refleja el distanciamiento del equipo de gobierno de los principios de inclusión y solidaridad que siempre han caracterizado a nuestra ciudad».
Desde VTLP han lanzado un llamamiento al Partido Popular para que reconsidere su posición política en el consistorio. «El Partido Popular debe pensar con quién quiere seguir gobernando en este Ayuntamiento, porque cada vez se escora más hacia la extrema derecha y cada vez defiende menos los derechos humanos en nuestra ciudad», señaló la portavoz.
Anguita enfatizó que los derechos humanos son un pilar innegociable de las políticas públicas: «Es responsabilidad de las instituciones, incluido el Ayuntamiento de Valladolid, garantizar la defensa de estos derechos en todos los espacios». Además, hizo un llamado a recuperar los valores de inclusión y acogida que tradicionalmente han definido a Valladolid. «Necesitamos una ciudad más inclusiva, más acogedora y que mantenga los valores que siempre nos han identificado como sociedad», concluyó.
Finalmente, VTLP reiteró su compromiso con la defensa de los derechos humanos y exigió al actual equipo de gobierno que abandone políticas excluyentes, recuperando su responsabilidad de construir una Valladolid inclusiva y solidaria, fiel a los principios de justicia y dignidad para todas las personas, sin importar su origen, género, religión o cualquier otra condición.