Ecologistas en Acción de Valladolid ha presentado recientemente al Ayuntamiento de la capital vallisoletana una serie de observaciones relacionadas con la Modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Estas observaciones se centran en la instalación propuesta de la planta de Inobat, dedicada a la fabricación de baterías para vehículos eléctricos. La organización ambientalista pone énfasis en la necesidad de una evaluación detallada de los impactos ambientales y urbanísticos de este proyecto.
La propuesta de Ecologistas en Acción señala la transformación de 4 hectáreas de suelo rústico en urbanizable y la recalificación de áreas residenciales y mixtas a industriales. Esto forma parte de un plan para desarrollar un nuevo polígono industrial de 148 hectáreas. La organización cuestiona la reubicación de 3.000 viviendas previstas en el PGOU, sugiriendo una revisión exhaustiva de las implicaciones de estos cambios.
La evaluación ambiental estratégica, según la Ley de Evaluación Ambiental, es un punto clave en las observaciones presentadas. Esta evaluación debe justificar la modificación propuesta, ofreciendo alternativas viables y analizando los efectos acumulativos de la expansión industrial. Se destaca la importancia de proteger los suelos agrícolas y las producciones alimentarias, vinculadas a la red de acequias del Canal del Duero.
Ecologistas en Acción resalta la necesidad de asegurar que la Modificación del PGOU sea compatible con otros planes territoriales, incluyendo las DOTVAENT y el Plan Regional del Valle del Duero. Estos planes se enfocan en la protección de la agricultura periurbana y los espacios agrarios con valor identitario.
Como parte de las medidas compensatorias, la organización sugiere la clasificación de ciertos suelos como rústicos. Así se aseguraría la protección agropecuaria y el paisaje agrario en el entorno periurbano de Valladolid. Esta medida busca prevenir futuras reclasificaciones de suelo que puedan afectar negativamente el equilibrio ecológico y la sostenibilidad.