En la mañana del domingo, los propietarios de una vivienda situada en la calle Primero de Mayo número 6 de Tudela de Duero se toparon con una inesperada sorpresa al entrar en una de las habitaciones de su domicilio. El matrimonio, residente en el primer piso del edificio, descubrió que los cristales de la galería estaban rotos y que en el suelo yacía una bala.
Lo más desconcertante para los alertantes fue que no escucharon ningún disparo ni detonación durante la noche, sino que fue al encontrar los restos en el suelo cuando decidieron dar aviso a las autoridades. Una patrulla de la Guardia Civil se personó en el lugar para inspeccionar la escena y, tras un minucioso análisis, determinaron que el daño podría tener su origen en el impacto de un proyectil proveniente de un arma de fuego, presuntamente un revólver.
El cuerpo de seguridad ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y determinar cómo la bala llegó hasta el domicilio de Tudela de Duero. Según las primeras pesquisas, todo apunta a que el disparo se habría efectuado desde la acera situada frente al edificio. El proyectil atravesó el cristal de la galería antes de caer en la habitación.
