El grupo municipal Valladolid Toma la Palabra (VTLP) ha manifestado su preocupación por los efectos adversos que podría tener la mascletá programada por el Ayuntamiento de Valladolid para el próximo 8 de septiembre. Este evento, que incluirá la detonación de 150 kilogramos de pólvora en un espectáculo de ocho minutos, lo señala VTLP como una actividad perjudicial para la salud pública y el bienestar animal.
Jonathan Racionero, concejal de VTLP, ha expresado su desacuerdo con la realización de esta manifestación pirotécnica, afirmando que se trata de “un espectáculo que no aporta ningún beneficio a la ciudadanía de Valladolid”. Según Racionero, el impacto del ruido generado por la mascletá no ha sido debidamente considerado, especialmente en lo que respecta a personas con hipersensibilidad acústica, trastornos del espectro autista, niños, pacientes con enfermedades crónicas, y particularmente aquellas relacionadas con el corazón.
El concejal también critica la falta de consideración hacia el impacto negativo en los animales, subrayando que “es irrelevante que ahora hablen de minimizar el impacto de la mascletá en personas sensibles, mediante la creación de ¨espacios amigables¨”. Además, Racionero cuestiona si se ha tenido en cuenta el alcance del ruido que pueden generar 150 kilogramos de explosivos, independientemente de la ubicación elegida para el evento.
VTLP también advierte sobre las posibles consecuencias para la fauna local, destacando que el evento podría causar daños irreparables, incluyendo la muerte de aves, algunas de ellas protegidas, y el peligro para los animales domésticos que habitan en la ciudad.
Racionero ha enmarcado esta mascletá dentro de una serie de acciones que, según él, demuestran una «clara falta de sensibilidad ecológica» por parte del actual equipo de gobierno, señalando que “la mascletá es una acción más de las muchas que se están llevando a cabo en la ciudad de Valladolid contra el medioambiente”. El concejal también ha mencionado otras preocupaciones ambientales, como las talas de árboles, el uso de sustancias químicas nocivas, la eliminación de carriles bici, y la falta de inversión en transporte público.
Finalmente, Racionero subraya que “no tiene sentido alguno hacer una mascletá en Valladolid, una actividad totalmente ajena a la tradición local y que, además, no aporta nada positivo, ya que contamos con un extenso programa de fuegos artificiales que ha funcionado muy bien para este tipo de espectáculos”.