En la bautizada como “Operación Romano”, la Policía Nacional ha logrado desarticular una trama delictiva que estafó a tres personas mayores residentes en Valladolid, sustrayéndoles un total de 67.500 euros. Los hechos salieron a la luz en marzo de 2024, cuando las víctimas interpusieron sendas denuncias alertando de fraudes en sus cuentas bancarias.
El modus operandi de los estafadores consistía en realizar portabilidades fraudulentas de las líneas telefónicas de las víctimas, sin su conocimiento ni autorización. De esta forma, los delincuentes recibían los códigos de seguridad en dispositivos controlados por ellos mismos.
Con el control de las cuentas bancarias, realizaban transferencias a tarjetas asociadas y efectuaban compras fraudulentas en establecimientos comerciales, así como movimientos hacia otras cuentas que manejaban. Al tratarse de personas de edad avanzada, las víctimas tardaban en percatarse del fraude, creyendo inicialmente que se trataba de un problema con su operadora de telefonía móvil.
La investigación del Grupo de Ciberdelincuencia de la Comisaría Provincial de Valladolid permitió identificar a dos varones que operaban en Madrid. Uno de ellos fue localizado tras adquirir tres teléfonos de alta gama valorados en 4.227 euros en el distrito de Hortaleza-Barajas.
En esta “Operación Romano” en colaboración con la Brigada Local de Policía Judicial de Madrid, se llevó a cabo una investigación conjunta que reveló que los estafadores habían realizado diversas compras fraudulentas, incluyendo teléfonos, consolas de videojuegos, joyas, un lingote de oro y elevados cargos en páginas de juegos online.
El pasado 2 de julio, se estableció un operativo en Madrid que culminó con la detención de los dos hombres implicados en el delito continuado de estafa. Gracias a la rápida actuación policial, se ha logrado bloquear y devolver a las cuentas de las víctimas casi 24.000 euros, mitigando parcialmente el fraude ocasionado.
