La operación ‘Pacquiao’, liderada por la Guardia Civil, ha sacado a la luz un fraude millonario en el cobro de las subvenciones de la Política Agrícola Común (PAC) de la Unión Europea. Este engaño, que afecta a varias provincias de Castilla y León, se ha llevado a cabo, presuntamente, en connivencia con personal de la Junta de esta comunidad autónoma.
Las investigaciones, que comenzaron en junio de 2022, revelaron que alrededor de 30 personas habían falseado condiciones para obtener de forma ilícita ayudas de la PAC. Estas ayudas, destinadas a apoyar las rentas de agricultores y ganaderos, tienen como objetivo garantizar la producción de alimentos seguros y rentabilizar la agricultura.
El fraude se centró en la simulación de pastoreo con animales destinados al consumo humano en terrenos específicos asignados a cada solicitante. Los ganaderos implicados, principalmente de la provincia de Palencia, solicitaban estas ayudas simulando el pastoreo, cuando en realidad, los animales nunca pastaban en dichas tierras. Estos ganaderos, que poseían explotaciones intensivas de ganado vacuno, obtenían beneficios ilícitos que rondaban los 45.000 euros anuales por ganadero.
Además, se descubrió que los pastos por los que se recibían las ayudas eran reasignados de manera ilícita a ganaderos del sur de España. Estos últimos trasladaban su ganado a los pastos mencionados para realizar la trashumancia, obteniendo así un doble beneficio.
El fraude estaba liderado desde dentro.
La trama estaba encabezada por el Jefe de la Sección Agraria Comarcal (SAC), quien validaba y gestionaba los expedientes fraudulentos, ignorando las advertencias de otros técnicos. Curiosamente, la veterinaria encargada de inspeccionar el ganado era pareja del mencionado jefe, y no realizó ninguna inspección durante el periodo investigado. Además, el Presidente de la Junta Vecinal, hermano del Jefe de la SAC, emitía certificados fraudulentos de uso de pastos.
Se estima que el beneficio económico obtenido por esta trama ronda el millón de euros. Como resultado de la investigación patrimonial paralela, se han congelado cerca de cien inmuebles valorados en más de cuatro millones de euros.
Los delitos imputados a los investigados incluyen fraude de subvenciones, prevaricación administrativa, falsedad documental y estafa. Las irregularidades detectadas afectan a ganaderos de Palencia, Zamora, Valladolid, Segovia, Ávila, Salamanca y Cantabria.
La operación ‘Pacquiao’ es un claro ejemplo de cómo la corrupción puede infiltrarse en las estructuras más básicas de nuestra sociedad, poniendo en peligro la integridad de sistemas que deberían beneficiar a quienes realmente los necesitan.
