Aún estando acostumbrados a ver los exabruptos, ridículos varios y banalidades habituales de los representes de la extrema derecha en las instituciones, parece que no se cansan de sorprendernos, ahora con a través de VOX Zamora y con Balas.
Un acto inesperado marcó la reciente sesión de la Diputación de Zamora cuando David García, representante de Vox, sacó una bala durante un debate sobre la influencia de EH Bildu en la Alcaldía de Pamplona (si, en Zamora). García, apelando a su experiencia como policía municipal en Donostia y escolta de concejales, afirmó: «Hoy vamos a votar con las balas en la mesa. Son las balas que esta gente [los terroristas de ETA] metía en la cabeza a toda esta gente [las víctimas]».
La maniobra de García ha sido interpretada por muchos como una estrategia para desviar la atención de los problemas urgentes de Zamora, que enfrenta desafíos como la despoblación, la falta de oportunidades laborales y de inversión en servicios públicos básicos para una provincia que se vacía mes a mes.
Vox y su gestión en las instituciones
Vox no se cansa de desviar la atención a cualquier tema que no sea las nefastas consecuencias que están generando para la comunidad su acción de gobierno en Castilla y León y no duda en en utilizar a VOX Zamora y balas para ello.
La diputada de IU, Laura Rivera, criticó al PP por centrarse en temas no relacionados con Zamora, ironizando sobre la relevancia de Pamplona en el contexto local.
Por su parte , Sandra Veleda, del PSOE, calificó la moción del PP como «pura demagogia y extemporánea». Argumentó que si el PP hubiera buscado un consenso, habría invitado a todos los grupos políticos a discutir y llegar a un acuerdo unánime, subrayando así la legitimidad de la moción de censura en Pamplona.
La sesión en la Diputación de Zamora, lejos de centrarse en asuntos prioritarios para la provincia, se vio envuelta en una dinámica que refleja una tendencia preocupante en la política actual: la preferencia por la teatralización en detrimento de la rigurosidad y la preocupación en los asuntos locales. Este enfoque desplaza la atención de los verdaderos desafíos que enfrentan los ciudadanos de Zamora día a día, dejando en segundo plano temas como el desarrollo económico, la mejora de infraestructuras y servicios, y la lucha contra la despoblación.