El pasado viernes 21 de junio, el Ayuntamiento de Burgos aprobó por unanimidad la disolución de los consorcios del Desvío Ferroviario y Villalonquejar, una medida exigida por Podemos Burgos desde hace años. Según la formación política, «los consorcios se mostraron ineficaces y un pozo sin fondo desde el primer momento, suponiendo un círculo vicioso de generación de deuda año tras año».
Podemos Burgos sostiene que este sistema solo atendía a los intereses de las entidades financieras involucradas, como las antiguas Cajas de Ahorros y los bancos que las absorbieron. Como resultado de esta gestión, el Ayuntamiento asume actualmente una deuda de 209 millones de euros, que según Podemos, «habría sido mucho menor de haber disuelto los consorcios cuando Podemos lo indicó».
La organización política considera «intolerable una gestión tan deficiente», responsabilizando a los partidos PSOE, PP y VOX de haber «arruinado las arcas de nuestra ciudad, dilapidando un dinero que podría emplearse para la creación de un parque de vivienda pública sin parangón, la dotación de mejores infraestructuras deportivas y culturales, el incremento del número de plazas públicas de guardería», entre otras mejoras para la vida de los vecinos.
Podemos señala al anterior equipo de gobierno y a la actual alcaldesa Cristina Ayala como «los máximos responsables del desfalco que han supuesto los consorcios para las arcas públicas» y hace un llamamiento a la ciudadanía para que recuerde la cifra de 209 millones de euros y reflexione sobre su potencial uso en la ciudad. Finalmente, Podemos afirma que «una vez más, tenía razón» al haber exigido la disolución de los consorcios hace años.
