Los rincones rurales de la provincia de Burgos recibirán un impulso tecnológico significativo. La tecnología 5G está en camino, con más de 20 millones de euros asignados para el despliegue de este servicio esencial en áreas a menudo olvidadas por el avance tecnológico.
El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital está al frente de este esfuerzo, destinado a acelerar la implementación de la tecnología 5G en las zonas rurales de Castilla y León. El ministerio ya ha comprometido una inversión total de más de 200 millones de euros para esta tarea, centrándose particularmente en los municipios de menos de 10.000 habitantes.
Burgos, con esta asignación de fondos, lidera la lista en Castilla y León. Le siguen León, con más de 18 millones, Salamanca con 13,3 millones, Zamora con cerca de 12 millones y Valladolid con 10 millones.
Estas subvenciones a las provincias de Castilla y León suman un total de 107,7 millones de euros. Su finalidad es promover el despliegue de infraestructuras necesarias para prestar servicios basados en la tecnología 5G en zonas rurales. Este esfuerzo persigue un triple objetivo: garantizar la cohesión territorial, evitar una brecha digital y hacer frente al desafío demográfico.
¿De dónde proviene esta inversión realmente?
Las ayudas provienen de los fondos europeos Next Generation. Se aprobaron tras un meticuloso proceso de evaluación de las 255 solicitudes presentadas por 11 operadores que cubren las 50 provincias españolas. A nivel nacional, se otorgaron ayudas provisionales por un total de 448,8 millones de euros para proyectos destinados a conectar a través de fibra óptica los sitios de las redes públicas de telefonía móvil en municipios de menos de 5.000 habitantes.
Estos fondos permitirán a los operadores realizar las inversiones y gastos necesarios para el desarrollo de proyectos de despliegue de fibra hasta las torres. Esto abarca desde infraestructuras y obra civil hasta equipamiento y materiales.
El 5G, la quinta generación de tecnología celular inalámbrica, promete ofrecer velocidades de carga y descarga superiores, conexiones más consistentes y una mayor capacidad en comparación con las redes anteriores, como el 4G o el 3G. La llegada de esta tecnología a las zonas rurales de Burgos representará un avance significativo en la conectividad y la inclusión digital.