El Grupo Municipal Socialista en Valladolid ha lanzado un llamado contundente: la retirada de los presupuestos municipales de 2024. Esta petición, articulada por el portavoz del PSOE, Pedro Herrero, responde a una necesidad urgente de tiempo adicional para un análisis detallado y la preparación de enmiendas pertinentes.
Los presupuestos municipales de 2024 deben revisarse de manera exhaustiva.
La solicitud del PSOE surge en medio de un calendario apretado, marcado por la prisa en la aprobación de los presupuestos. Herrero, en una crítica directa a la gestión del alcalde, señala la falta de un «impedimento jurídico» que justifique la negativa a otorgar esta prórroga. La situación se agrava con la acusación de una «actitud autoritaria» por parte del equipo de gobierno, que, según el PSOE, choca frontalmente con las normas democráticas del Ayuntamiento de Valladolid.
El escenario actual contrasta marcadamente con el precedente de 2015, cuando, bajo el mandato de Óscar Puente, se adoptó un calendario similar. En aquel entonces, no se registraron objeciones por parte de los concejales del Partido Popular ni de Ciudadanos, una diferencia notable con la situación actual, donde el pedido de prórroga es explícito y reiterado tanto por el PSOE como por Valladolid Toma La Palabra (VTLP).
La decisión del alcalde, según Herrero, no solo representa una falta de respeto hacia los grupos de la oposición, sino también hacia los funcionarios municipales, sometidos a un estrés innecesario e injustificado.
La Comisión de Hacienda, celebrada recientemente, ha sido el escenario de esta controversia. A pesar de las comparecencias pendientes de los concejales, el PSOE insiste en la necesidad de un tiempo adicional para un análisis exhaustivo de los presupuestos. Esta reclamación refleja una preocupación profunda por la transparencia y la adecuada gestión de los recursos públicos.
En Valladolid, el papel de los grupos de la oposición se vuelve crucial. Su labor de control y fiscalización es fundamental para garantizar que las decisiones tomadas en el Ayuntamiento reflejen los intereses y necesidades de la ciudadanía vallisoletana.
