La localidad de Villoria es testigo de una serie de actos vandálicos tras la celebración de la tradicional fiesta de los quintos. El Ayuntamiento de Villoria ha informado sobre los daños ocasionados, que incluyen ventanas rotas, basura dispersa y extintores vaciados. Este evento, que usualmente simboliza la transición a la adultez de los jóvenes del pueblo, se ha visto empañado por acciones claramente incívicas y destructivas.
Entre los daños reportados se encuentran una ventana de la Cámara Agraria fracturada, el baño de la caseta de los quintos dañado con troncos en el inodoro, y tres contenedores de basura derribados. Se ha informado también sobre la destrucción de un bombo de puerta y un arcón frigorífico donado por quintas anteriores. Un incidente particularmente grave involucra el vaciado de un extintor en un aula de inglés, lo que podría haber causado daños al equipo informático.
El alcalde de Villoria, Alejandro González, ha dialogado con los jóvenes implicados. Aunque han reconocido algunos de los daños, han referido a una «tradición» de dejar el local en malas condiciones para que lo limpien los quintos del año siguiente. Esta explicación ha sido rechazada tanto por la administración local como por la comunidad.
La reacción de los residentes de Villoria ha sido de claro rechazo a estos actos, expresando su descontento en diversas plataformas. Ante esta situación, el Ayuntamiento está evaluando medidas más rigurosas, incluyendo el aumento de la fianza para el uso de instalaciones municipales o la posibilidad de no facilitar locales para futuras celebraciones.
