La Audiencia Provincial de Salamanca ha dictado una sentencia de tres años y medio de prisión contra una mujer por cometer un delito de estafa y falsedad documental. La condena incluye, además, una multa y la obligación de indemnizar a la víctima con 217.666 euros, la cantidad total estafada.
El caso se originó en 2018, cuando la acusada y el afectado, un residente de Salamanca, se conocieron en una red social. A partir de este encuentro virtual, se estableció una relación de amistad, caracterizada por un intercambio constante de mensajes, llamadas y fotografías. Esta relación se mantuvo hasta finales de 2021, sin evolucionar hacia un vínculo sentimental o de pareja.
Durante este período, la mujer solicitó repetidamente dinero al hombre, alegando dificultades económicas y situaciones de urgencia. Las cantidades pedidas, que inicialmente eran modestas, aumentaron progresivamente. Entre las razones dadas por la acusada para justificar estas solicitudes se encontraban la necesidad de pagar alquiler para evitar un desalojo y gastos relacionados con un familiar enfermo.
La estafa alcanzó un punto crítico con la formalización de un contrato de préstamo por valor de 20.000 euros en enero de 2020. Para persuadir a la víctima de su capacidad de devolución, la acusada presentó justificantes bancarios y documentos manipulados.
La Audiencia Provincial, tras analizar las evidencias y declaraciones, concluyó que la mujer se aprovechó de la confianza depositada por la víctima para obtener fraudulentamente la suma de 217.666 euros. La sentencia destaca la falta de reintegro de cualquier cantidad y la manipulación documental como elementos agravantes.
