La violencia doméstica ha ha vuelto a sacudir Burgos con un incidente que ha desencadenado una rápida respuesta de la Policía Local. Una joven de 23 años ha sido detenida, acusada de agredir a sus progenitores. Esta información ha sido confirmada oficialmente por la Policía Local de Burgos.
El suceso se desencadenó en la vivienda de la sospechosa, ubicada en la calle Benedictinas de San José. Las autoridades han catalogado la acusación como un delito de malos tratos en el ámbito familiar, resaltando la gravedad del incidente.
El incidente se produjo durante la madrugada del sábado 29 de julio. Cerca de las 02:45 horas, el servicio de emergencias 112 recibió un aviso, poniendo en marcha el protocolo correspondiente para este tipo de situaciones.
Respondiendo a la alerta, tanto la Unidad de Protección Ciudadana como la Unidad Canina de la Policía Local se trasladaron de inmediato al domicilio. En el lugar, los padres de la presunta agresora confirmaron a los agentes el violento incidente, detallando que la joven de 23 años les había agredido después de una discusión.
El caso de violencia doméstica en Burgos es un recordatorio preocupante del problema de la violencia intrafamiliar que afronta nuestra sociedad. Mientras la investigación sigue en curso, la comunidad local aguarda con expectación los resultados, esperando que se haga justicia y se dé un paso firme contra este tipo de conductas violentas.
