Un ciudadano de Burgos ha desencadenado una operación policial tras ser víctima de una estafa que le costó 12.750 euros. La víctima, en su intento de obtener un carné de conducir de manera más accesible, se encontró en el centro de una red de falsificación y estafa.
El inicio de esta insólita historia se remonta a cuando el burgalés, buscando opciones para sacar su permiso de conducir, se topó con una oferta en línea que parecía demasiado buena para ser verdad. Contactado por WhatsApp por una persona que afirmaba trabajar en la Dirección General de Tráfico, se le prometió la entrega del carné sin necesidad de pasar por las pruebas habituales. La comunicación incluía instrucciones claras para realizar transferencias y pagos a través de Bizum a varias cuentas bancarias.
Siguiendo estas indicaciones, el denunciante realizó un total de nueve transacciones en cuatro días, sumando la cantidad antes mencionada. La sorpresa llegó cuando recibió un carné de conducir falso en su domicilio, momento en el que decidió denunciar el hecho a las autoridades. En la denuncia aportó todos los justificantes de pago así como el propio carné obtenido.
La Policía Nacional de Burgos, tras recibir la denuncia, puso en marcha una investigación detallada. Los agentes especializados en delitos de estafa lograron identificar a la presunta autora del delito, una mujer que reside en otra comunidad autónoma. La investigación incluyó un análisis pericial del documento falso, que confirmó sin lugar a dudas su naturaleza fraudulenta.
Las pistas sobre la titularidad de las cuentas bancarias llevaron a los investigadores hasta una pequeña localidad, donde reside la mujer señalada como la responsable de esta elaborada trama de estafa y falsificación. Con la identificación de esta mujer joven, se ha procedido a informar a los servicios policiales competentes, quedando pendiente su localización y detención.