La Asociación de Ciclistas de Valladolid (ASCIVA) ha manifestado su apoyo a la creación de un nuevo carril bici en el polígono de San Cristóbal, aunque ha expresado serias reservas sobre el diseño actual del proyecto. Según la asociación, el trazado propuesto adolece de una serie de deficiencias que comprometen la seguridad y la funcionalidad de esta infraestructura tan necesaria.
«El proyecto presentado es un ejercicio de mala planificación», afirma un portavoz de ASCIVA. La crítica se centra en la decisión de situar el carril bici únicamente en un lado de dos calles amplias, lo que limita su utilidad. Además, se señala la ausencia de una vía ciclista segregada en calles clave como Topacio, Galena u Oro, pese a su relevancia y amplitud.
La propuesta de ASCIVA.
La asociación también ha puesto de manifiesto que el ancho del carril bici, de solo 2,4 metros, es insuficiente según las recomendaciones del Plan General de Ordenación Urbana 2020, llegando incluso a reducirse a menos de 2 metros en algunos puntos. Esta estrechez se extiende a la acera proyectada, que en ciertas áreas se reduce a 1,28 metros, incumpliendo la Ley de Accesibilidad.
Otro aspecto controvertido es la colocación de paradas de autobús sobre el carril bici, lo que, según ASCIVA, «empeora la seguridad de los usuarios del transporte público». La financiación del proyecto, que cuenta con más de 1,7 millones de euros cofinanciados con fondos europeos, también ha sido objeto de debate. Aunque el presupuesto puede parecer adecuado, la asociación argumenta que el alcance de la obra es mucho mayor, incluyendo la reurbanización de las calles y la mejora de infraestructuras como la red eléctrica y la fibra óptica.
«El polígono de San Cristóbal es un destino esencial para miles de trabajadores diariamente, y actualmente es muy hostil para desplazarse en bici, a pie o en transporte público», señala ASCIVA. La asociación aplaude la iniciativa de un carril bici pero insiste en la necesidad de que se realice correctamente, respetando la seguridad y comodidad de todos los usuarios. Por ello, insta al Ayuntamiento de Valladolid a reconsiderar el trazado actual y a tener en cuenta las recomendaciones e iniciativas de los ciclistas de la ciudad.
